El Uso Apropiado del Tiempo

Al trazar nuestro mapa de la felicidad y el éxito, debemos tener muy presente que quizás tengamos que cambiar de ruta y dirección. En artículo sobre el poder de escribir nuestras metas, establecía que en un momento determinado debemos pararnos y evaluar cómo va nuestro andar, hasta donde hemos recorrido y si en el punto donde nos encontramos es realmente donde queríamos llegar. Esto en el campo gerencial se conoce como retroalimentación, pero para no esperar hasta el final del recorrido para evaluarnos porque perderíamos muchos recursos como el tiempo, podemos hacerlo de una manera planificada y con cierta frecuencia, así no tendremos que esperar llegar hasta el final para poder decir “…bueno, realmente esto no es lo que yo quería…”

Una de las creencias limitantes que nos colocamos es que siempre decimos que no tenemos tiempo para el cumplimiento o establecimiento de una nueva meta. Nos colocamos barreras que sólo existen en nuestro interior como “… estoy full en el trabajo, las tareas diarias me tienen súper ocupado, la casa, la esposa(o), los hijos, la familia…” en fin, gran cantidad de obstáculos que a veces fabricamos como excusa para no cumplir nuestra meta y no hacer el esfuerzo de alcanzar nuestros sueños.

“Nosotros sufrimos uno de dos dolores: el dolor de la disciplina o el dolor del arrepentimiento. La diferencia es que la disciplina pesa onzas mientras que el arrepentimiento pesa toneladas.”

Haciendo referencias al libro de Doce Pilares de Jim Rohn y Chris Widener establece en una de sus conversaciones con Michael, uno de los protagonistas de la Novela que:

“…Yo ya estoy viejo y estoy asombrado de lo rápido que pasa la vida. Para mí el fin se acerca. He vivido bien y he hecho todo lo que he deseado. Pero, aún hay tantos hombres y mujeres que nunca se han permitido soñar y dentro de aquellos que lo han hecho, la mayoría no superan el temor y no luchan por lograr su sueño. Luego, un día, se encuentran en su lecho de muerte y no hay nada, ni siquiera una cosa que puedan hacer para solucionarlo. Su cuerpo está frágil, débil y sin ánimo. Es entonces cuando sufren el tremendo peso del arrepentimiento...”

Es por ello que debemos vivir al máximo cada uno de los días, pero vivirlos bien, saber vivir, sin desperdiciar ni malgastar el tiempo ni los días en cosas que no nos generen valor, prosperidad, rendimiento, paz, estabilidad y bienestar, ya que cada día que pasa es costoso y es un día que nos gastamos y no podemos recuperar. Entonces para gastar nuestros días sabiamente, debemos hacerlo en la mejor forma posible, realizando actividades que generen valor para nosotros como individuo y contribuyan a nuestro desarrollo personal.

“…Cada día tiene muchas oportunidades, pero sólo una de ellas es la mejor…”

Y precisamente son esas oportunidades los que nos llevan al cumplimiento de esas metas y debemos dedicarles tiempo. Por ejemplo, si me planteo una meta de cambiarme de trabajo dentro de un periodo de 01 año dentro del campo Gerencial, debo esforzarme día tras días para conseguir ese objetivo, sin malgastar el tiempo y luchar por lograrlo, realizando las cosas que son importantes y no urgentes, siendo esto una de las mayores confusiones de las personas.

Precisamente en estas planificaciones de la gestión del tiempo, encontramos que podemos dividirlos en cuatro cuadrantes como muchos de ustedes ya conocen. I) El Importante – Urgente, que representa crisis, estrés, cansancio, cortafuegos como dijo yo en la oficina. II) El Importante no Urgente, que es donde realmente planificamos y explotamos todo nuestro potencial ya que nos permite el desarrollo personal y visualizar el futuro; es precisamente en este cuadrante donde debemos establecer nuestras metas y gestionar bien el tiempo. III) No importante – Urgente, llamadas imprevistas – improvisación, planes sin sentido y IV) No Importante – Urgente, distracciones, actividades placenteras, irresponsabilidades, entre otras. Lo importante de todo esto es enfocarnos siempre en el cuadrante II y poder manejar el resto de los cuadrantes de una forma equilibrada.

Lo urgente es la tiranía que nos esclaviza si usted no le pone atención. Es mejor ser el dueño del tiempo que viceversa. Es importante ser el diseñador de nuestra vida.

Entonces debemos escoger. O nosotros manejamos el tiempo o el tiempo nos manejará a nosotros. O controlamos el día o el día nos controlará a nosotros. Lo importante de todo esto es que al momento de planificar nuestra vida, gestionemos bien el tiempo, de lo contrario debemos estar preparados para que otros planifiquen la vida por nosotros.

Con afecto y cariño, me despido nuevamente hasta la próxima entrega…