Life Coach o Coach de Vida
Bienvenidos nuevamente a este
espacio de compartir, reflexionar y de escape de nuestro entorno diario y
cotidiano que nos regala la vida. Espacio donde enfrento el reto de escribir
mis pensamientos pero que a su vez, gracias al impulso y motivación, de mi
fuente de inspiración interna, hace que plasme estas líneas en mi blog… Cada
mañana nos levantamos con el firme propósito de ser hoy mejor que ayer, pero
con la intención de prepararnos para ser mejores mañana. Wayne Dyer decía: “…totalmente
desprevenidos nos encontramos en el atardecer de la vida, lo peor de todo es
que nos adentramos en el con la falsa presunción de que nuestras verdades e
ideales nos servirán a partir de entonces. Pero no podemos vivir el atardecer
de la vida con el mismo programa que en la mañana, ya que lo que para la mañana
era mucho, en el atardecer será poco. Y en lo que en la mañana es verdadero, en
la tarde será falso…”
En la vida, vamos acumulando
experiencias y vivencias que nos sirven para construir ciertas realidades para
enfrentar la vida con un mejor sentido, definiendo nuevas intenciones de lo que
quizás creemos que vamos a ser. La vida sin darnos cuenta, se vuelve en una
constante carrera de lucha entre todos, una supervivencia a los retos de la
sociedad en que vivimos y una competencia para ver quien llega más alto y quien
se vuelve mejor que quién. Invadiéndonos el ego por creer que somos mejores
personas que los demás porque hemos realizados tantos viajes, poseemos ciertas propiedades,
viviendas, que mi casa es mejor que la tuya, mejor carro o por creer tener la
potestad de criticar la vida de alguien sin realmente mirar la vida de nosotros
mismos desde el interior, reflexionarla, analizarla y responder con la mayor
franqueza ¿es esto realmente lo que quiero?, ¿puedo cambiar lo que soy para ser
una mejor persona?, ¿Qué debo hacer para que mi vida sea más placentera y feliz?...
algo que es difícil de aceptar y comprender ya que es más fácil mirar hacia
afuera que mirar hacia adentro de nosotros mismos.
Si comprendemos esto sin tener el
ego implicado en nosotros, olvidándolo por completo, siendo un poco más
espiritual, doy fe de que abriremos muchas puertas, ya que no estaremos
centrados en nosotros mismos todo el tiempo sino que nos volcaremos a servir a
los demás, a saber ayudar con lo que tenemos y podemos hacer, ya que tenemos la
firme convicción de que atraemos lo que queremos en la vida y es un completo
error, “ya que realmente no atraes lo que quieres…. Atraes lo que eres, siempre
atraemos lo que somos”.
Hoy día he vivido muchas
experiencias en mi vida, unas buenas y otras que me han servido de aprendizaje
y construcción de nuevos conocimientos, el cual fortalece mi vida personal,
espiritual y alimenta mi yo interior. En ese sentido me ha tocado ser padre de
unos maravillosos hijos, jefe de la unidad donde trabajo, padrino, tío,
hermano, consejero y hasta cierto punto de apoyo familiar para algunas
situaciones un poco complicadas, el cual, apartando el ego, me vuelco a servir
a los demás para convertirme en una especie de guía, de luz, de motivador e
inspirador, roles o características que hacen hoy día son los facilitadores o
coach en las organizaciones, pero en el entorno familiar, un Coach
de Vida.
Existen muchos Coach de Vida
famosos, yo sigo en este caso a Wayne Dyer, Anthony Robbins, Deepak Chopra,
Ismael Cala, en la parte personal, ya que en el aspecto gerencial me gusta leer
a Jhon Withmore, Rafael Echeverria, Eduardo Marti, entre otros seguidores como
el trabajo que viene desarrollando Herman Betancourt junto con su esposa en la
organización que ellos llevan “Cefip
Venezuela” en los temas de felicidad organizacional… Todos ellos definen y
utilizan conceptos similares a lo que es un coach, el cual definiré de la forma
siguiente: “… un coach de vida es aquella persona que nos ayuda a vivir mejor,
que nos orienta para que podamos encontrar nuestras verdaderas motivaciones y
alinearlas con los objetivos de vida que tenemos planteado, esta persona nos da
impulso para alcanzar nuestro verdadero potencial y en definitiva, lograr una
vida más satisfactoria y feliz, lo que yo he plasmado en artículos anteriores,
nuestro camino a la felicidad.
Esta vida es una escuela de
conocimientos y aprendizajes constantes, donde a veces nos sentimos como si perdiéramos
la brújula de nuestro norte y que permita poder reencontrarnos con nuestro
camino. De igual forma, nos surgen situaciones que pensamos no haberlas querido
vivir o tener el poder de retroceder el tiempo para no hacer lo que hice o poder
hacerlas mejor. Esto ha ocurrido a la mayoría de las personas en algún momento
de sus vidas. Pero a veces estamos tan envueltos en nuestras propias
situaciones (nuestro ego interior) que no somos capaces de reconocer y analizar
con serenidad y espiritualidad, las emociones y sentimientos involucrados, de
analizar si con mis acciones hiero profundamente a los demás, si lo que voy a
decir es coherente y respetuoso para las personas. Es allí donde sentimos que
necesitamos ayuda de alguien que pueda evaluar sin pasiones y con mucha lógica lo
que debemos hacer y actuar, consejos útiles acerca de lo que queremos ser en
nuestras vidas.
Pues bien, aunque muchas veces
deseamos tener esa ayuda maravillosa que nos pueda proporcionar un coach de
vida, hay que recordar siempre que el principal motor de los cambios en
nuestras vidas están dentro de nosotros mismos, somos el principal fuente de
alimentación de las cosas que deseamos hacer, siguiendo la filosofía que
explica Ismael Cala a través de sus Pes, que son Pasión, Perseverancia y
Paciencia de alcanzar nuestros objetivos. “…Nada
cambia si tú no cambias, cuando cambies la manera de ver las cosas, las cosas
que miras cambian…” Wayne Dyer.
Ahora bien, en mis estudios de
Maestría tuve la dicha de aprender el Coaching Organizacional, en un Diplomado
que curso actualmente veo lo que es el Coaching Ontológico, el coaching
transformacional que surge del lenguaje y de los movimientos corporales de las
personas, despertando el sentido de la observación y de la conversación. Esto
ha permitido adquirir conocimientos, habilidades, herramientas e instrumentos
para asumir roles de Coach de Vida o
Life
Coach, principalmente en mi hogar, habilidad que pienso seguir
estudiando y desarrollando para poder aplicarlo a mis sobrinos, primos,
ahijados, familiares hasta llegar a los amigos, compañeros de trabajo y público
en general. A servir a los demás a través de las cosas que sabemos hacer,
transmitiendo el conocimiento de forma asertiva para la construcción de un proyecto
de vida… Trascender en el tiempo.
Hace unos meses atrás realice una
presentación denominada “Camino a la Felicidad”, el cual no
le he realizado la publicidad merecida a esa exposición que presenté sólo a mis
hijos y algunos familiares , donde trazo una especie de mapa para alcanzar la
felicidad y los objetivos y metas que nos planteamos en la vida. En un proyecto
de vida lo primero que recomiendo es analizar las debilidades y fortalezas del individuo, de nosotros mismos,
reconocer los recursos personales que potencien y fortalezcan el desempeño
individual. Hacemos una “Mirada hacia nuestra vida” despojados de prejuicios y
con la mayor objetividad posible (es decir, sin ego) identificando situaciones,
defectos, debilidades que dificultan el logro de nuestro proyecto, así como
también identificar nuestros talentos y habilidades.
Se debe trabajar nuestra autoestima, ya que nuestra opinión
positiva o negativa es importante en la
actitud que tenemos hacia la vida así como el valor y el amor que nos damos. Empieza
por creer en ti sin permitir que personas hagan dudar de tus talentos, ya que
todos “somos únicos con algo importante que aportar al mundo”. Si tú
mismo te convences de ello, las personas a tu alrededor lo percibirán, el cual te
permitirá liderar equipos con
naturalidad ya que si tu cambias podrás hacer que otras personas cambien. Si tú
estás bien, te sientes bien, ten la seguridad de que los tuyos y las personas
que están alrededor de ti se sentirán igual de bien, como la ley espiritual de
Chopra sobre la ley del Karma (causa – efecto), donde expresa que cada acción
que hacemos, genera una energía que regresa de igual forma, es decir, somos lo
que queremos ser ya que “lo que se siembra es lo que se cosecha”,
así que cuidemos lo que sembremos en el jardín extraordinario de la vida. (Te invito a leer el Artículo que
lleva este nombre en este blog)
El cambio: Wayne Dyer decía que para cambiar las cosas primero
debemos cambiar nosotros mismos, nuestras costumbres por hábitos altamente
efectivos (Stephen Covey)
que permitirán alcanzar nuestros objetivos y trazar nuestro plan de acción,
para pensar y hacer lo que queremos en el futuro. Es un compromiso que debemos
realizar y mantener con nosotros mismos, donde la perseverancia vuelve a
aparecer para ayudarnos a vencer cualquier dificultad recordando que tenemos el
poder de transformar esos obstáculos en aprendizajes y en conocimientos para
hacer mejor las cosas. La motivación y la inspiración también serán la fuerza
interior que nos guie e ilumine.
Los retos son nuevas oportunidades de crecimientos: cada reto u
ofrecimiento es una oportunidad para cambiar, una ventana que se abre hacia un
posible futuro mejor ya que nos ofrece la oportunidad de crecer, aprender y
evolucionar eliminando cualquier temor o resistencia a cambio gracias a la
firme creencia que tenemos de nosotros mismos.
Ahora si podemos definir nuestro plan de acción: es decir, podemos
trasladarnos de nuestro estado presente a nuestro estado deseado. Definiendo
objetivos SMART (medibles,
alcanzables, duraderos, específicos, reales); y con los recursos disponibles
para ello empezamos a planear lo que deseamos en nuestras vidas
independientemente del entorno, es decir, podemos desarrollar un plan de acción
para la familia, para el trabajo, los estudios, amigos, etc. Te recomiendo
cambiar el foco de atención de lo que está mal y preguntarnos ¿qué es lo que
quiero?. Así podemos diseñar nuestro futuro controlando su progreso y
ejecutando la acción de lo que queremos alcanzar.
Debemos encontrar un buen punto de apoyo o de
equilibro, el cual nos servirá de base y estímulo espiritual cuando durante
nuestro camino del plan de vida, nos encontremos con algunos inconvenientes u
obstáculos que dificulten el logro de los objetivos, pero es sólo eso, lo
dificultan por un momento, ya que debemos tener la sabiduría y la fortaleza
necesaria para mejorar y seguir adelante en el sueño que tenemos planteado. Entrando
en juego nuevamente la “p” de paciencia, perseverancia y seguir con pasión. También
debemos identificar nuestro saboteador interno, ya que muchas veces somos
nosotros mismos lo que deterioramos nuestros sueños, a través de ciertas
creencias limitantes a través de afirmaciones de miedo como ¡yo no podré lograr
eso¡ no merezco ser buen alumno! ¡soy algo torpe y tonto para ello!, cambiándolas
por afirmaciones positivas simplemente modificando el escenario, el tono de voz
y repitiendo la afirmación varias veces hasta convencernos de que si podemos
lograrlo!!!, alimentamos de frecuencias positivas nuestro ser interior. Aquí también
están presente los Coach de Vida, ya que sirven de motivador e impulsador a las
personas a conquistar sus sueños y planes, ya que aconsejaran acerca de cómo
hacer mejor las cosas con los recursos que se tienen disponible. El apoyo familiar
también es un punto importante a la hora de alcanzar sueños.
Desafía barreas y solicita opinión de personas expertas: ya que no
tenemos por qué saberlo todo, siempre es bueno escuchar o leer a personas con
experiencias de éxito. Existen muchas páginas sobre estos temas de éxito,
coaching, liderazgo, igual que libros acerca de la felicidad y bienestar
personal. Portales web y libros algunos de renombre, otros no tanto pero que de
igual forma sirve para nuestra guía y conocimiento. En ellos podemos evaluar y
medir cuales fueron sus factores determinantes para tener éxito y ajustarlo a
nuestro contexto, pero para ello debemos desafiar toda barrera limitante
emocional como los conflictos o dudas en ti mismo, deja el temor de los
fracasos anteriores a un lado y conviértelas en experiencias positivas acerca
de cómo ser mejor las cosas. Recuerda siempre creer en ti y en tener las
capacidades de alcanzar los sueños.
Visualiza tu futuro: sé el protagonista de tu propia película, visualiza
mentalmente cada detalle de los objetivos que estás alcanzando, relájate, imagínate
el escenario de éxito. En esta película, tú eres espectador y protagonista al
mismo tiempo. Visualiza que estás haciendo tu tarea exactamente cómo quieres
hacerla, siente los movimientos de tu cuerpo, encuentra tu equilibrio, cuanto
más detalles te permitas realizar, más enriquecedor y fructífero será este
proceso.
Una vez satisfecho con este
proceso, archívalo en tu memoria para que puedas visualizarlo tantas veces como
quieras. A lo largo del desarrollo del plan, podrás aplicar ciertos indicadores
de éxito que te permitirá medir, si el resultado obtenido es el
resultado esperado y poder realizar los ajustes necesarios a tiempo, sin perder
nuestro norte u objetivo trazados. Siempre debes tener presente la fuente
de la motivación, por qué hacemos las cosas, y para esto es importante
conocernos a nosotros mismos, que nos impulsa a movernos y que es lo que queremos
alcanzar. Esa fuente divina llamada inspiración y pasión y que se encuentra
dentro de nosotros, es lo que nos permitirá siempre alcanzar el sueño que
deseamos, de atraer lo que somos y de cambiar las cosas que queremos cambiar. Es
una garantía de éxito y de vivir una vida más placentera y feliz.
Dios es amor!!!
Namaste!!!
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